MEREDITH Y BRIAN

Yo pensaba que trabajar en febrero era relajado, bien muerto como está nuestra capital. Pero no, los jefes se van de vacaciones y los novatos como yo tienen que hacerse cargo de todo.
No me queda tiempo para escribir en el blog (ahora tuve un rato más libre) pero si para relajarme cuando llego cansada en la tarde…viendo tv. Estoy en uno de esos periodos adictos a la televisión, especialmente en dos programas que quería comentar.
El primero es la popular Grey’s Anatomy que muchos de ustedes deben seguir y al igual que yo deben estar ansiosos por la ya inaugurada tercera temporada. La verdad es que seguí la primera y me perdí pocos capítulos (los finales), en cambio la segunda la vi de vez en cuando…pero hace poco estaban repitiendo dicha temporada, la pesqué en los últimos capítulos y me envicié. Incluso por ver a Meredith Grey y compañía dejé de ir a algunos panoramas que tenía con la gente que está en Santiago (eventos que son bastante interesantes en esta época).
Lo que más me gusta de la serie, además de sus historias y guapos doctores son las enseñanzas que su protagonista da en cada capitulo. La interna Grey analiza las situaciones en la que ella y sus amigos se encuentran, a veces en algo que pareciera ser una metáfora, y saca conclusiones que sirven para toda situación. O quizás yo las saco del contexto y las llevo a mi vida personal, no sé, pero si ese es el objetivo, conmigo funciona.
Por otro lado también me he hecho seguidora de una serie que tengo entendido que es poco vista….What about Bryan. He visto pocos capítulos, a veces me salto algunos pero da lo mismo porque es fácil de seguir. Lo que quiero destacar de este programa es que muestra como Brian, un joven que se enamora de la prometida de su mejor amigo representa el lado femenino de los hombres (esto es una impresión mía, quizás esta serie tiene como fin mostrar como es la relación de los amigos hombres o de hombre y mujer, que se yo). Me da la impresión que Brian actúa como una lo haría en esas situaciones y que nos (o me) gustaría que lo hicieran los hombres en general. Digamos que de una manera menos básica de la que lo hacen y así entenderlos mejor. Porque es clásico que frente a alguna situación por ejemplo si uno demuestra mucho cariño a la persona con que está saliendo después anda pensando “uyyy debe creer que estoy demasiado embalada con él, las cagué, debería ser menos demostrativa, más dificil”, cuando el otro no cree nada ni se ha pasado ningún rollo por la cabeza. Bueno, así es Brian, se estaría pasando el rollo por la cabeza y si fuese así con todos sería mucho más fácil pensar en cómo actuar frente a ellos. Pienso que quizás si existen los Brians, pero yo no los he conocido personalmente.

¿TRANSANTIAGO O RINOCERONTE?

No puedo empezar a escribir nada sin antes dar las gracias a mis nuevos contactos de Blog por incentivarme a seguir escribiendo.
Hoy quería comentar algo que me imagino muchos habrán analizado...el fenómeno que remeció a nuestra capital el fin de semana pasado: La Pequeña Gigante y su rinoceronte.
Lamentablemente por esos días partí a la playa ya que el cansancio y compromisos personales me hicieron abandonar la ciudad y la posibilidad de ver este espectáculo y todo lo que implicó: nuestro país vuelto loco, las calles repletas de gente y "extra" de noticiarios cada dos segundos en la televisión. Realmente no importó mucho haber salido en Santiago ya que con estos avances noticios cada una hora me hicieron sentirme participe de este evento.
Más que nada quería comentar algo que vi en las noticias el día anterior a que esta gigante emergiera por las calles capitalinas. El jueves, dos micros amarillas y un auto amanecieron frente a La Moneda como resultado de un colosal accidente. Los peatones miraban la escena confusos. Las cámaras de tv que llegaron al lugar a reportear la situación entrevistaron a los presentes para saber si sabían de qué se trataba. El 99% de las respuesta fue "Bueno, esto es claramente una manifestación por el Transantiago"..."Obvio, esto es un alegato por la nueva tarjeta del Transantiago"..."Esto es un montaje, una nueva forma de alegar por el Transantiago, que realmente no sirve"...y así seguían las largas explicaciones de los transeuntes, quienes estaban segurisimos sobre esta nueva forma de manifestarse. Sólo un niño de unos 11 años dio con el clavo: "Esto es el resultado de lo que hizo un rinoceronte que está suelto. Una niña gigante saldrá a capturarlo".

La dejada

Hace 4 meses que cree este blog. Le mandé mails a todo el mundo para que lo leyeran y así generar discusiones o simples conversaciones banales. Pero tuve con suerte 2 respuestas, por lo que me di cuenta que nadie iba tomarlo en cuenta. Después de tal conclusión se me olvidó el blog y seguí con mi vida. Pero durante este mes he tenido menos pega por lo que me he metido a varios blogs y me acordé de mi olvidado espacio. Me metí y encontré más comentarios, lo cual me incentivó a seguir escribiendo. Además me di cuenta que al meterse en este mundillo, comentando en otros espacios, podía encontrar gente que apreciara los blogs. Así podré escribir mis cosas sin tener que hacerlo en un cuaderno personal que nadie lee.
estamos en contacto








AMPARO

¿EL REY?

Ayer en la tarde estaba con Ignacio echados viendo televisión cuando le dije que nos pararamos y dejaramos la lata de lado para ir al cine. La única película que estaban dando a esa hora era "El rey de los huevones". La verdad es que yo tenía ganas de ver otra película y no me interesaba para nada la chilena, pero entre eso y quedarse en la casa, partimos.
Llegué con 0 expectativa. La película resultó ser entretenida, me rei harto y lo pasé bien. Para pasar el rato. Mientras estaba sentada en el cine me acordé todo el tiempo de "Sexo con Amor". Si bien las tramas son diferentes, las dos son comedias que tratan de temas de la sociedad chilena. En "Sexo..." sobre los problemas y situaciones sexuales de los chilenos y en "El rey de..." sobre un tipo que de tan bueno que es pasa a ser un verdadero idiota. Se nota la mano del director. La aparición de Boris Quercia hace que uno identifique más una película con la otra. O por lo menos eso me pasó a mí...

AL FIN!!!

Hace algún tiempo llegué por casualidad al blog de una conocida. Me entretuve leyendolo sobre su vida, lo que le había pasado últimamente, sus opiniones sobre cine, libros, etc. Me puse a pensar porqué no hacia mi propio blog; me gusta mucho escribir sobre lo que observo y oigo, incluso de lo que me pasa. Pero de dejada y de tímida no lo hice. Me daba verguenza abrir mi vida más allá de lo que lo hago permanentemente o que mis conocidos lo encontraran ridiculo.
Hoy volví a leer el blog de esa persona conocida. Y me dí cuenta que qué me importa que alguien encuentre ridiculo que alguien tenga un blog, si a mi es la que me gusta escribir...porque en el fondo algo de alma de periodista tengo que tener...el que quiere que lo lea, el que no, no. Ojalá que igual pongan sus comentarios, porque una vez hice un blog para que mis amigas de colegio escribieran ahi y sólo obtuve un comentario (eso que recibí más de 11 mails felicitandome por mi buena idea y la iniciativa).